Hoy presentaré una araña cangrejo, por lo tanto Superfamilia Thomisoidea Sundevall, 1833 y Familia Thomisidae Sundevall, 1833.
La familia Thomisidae se reparte por todo el mundo. Cuenta con más de 2.500 especies conocidas que no representan peligro para el ser humano. Al contrario, son beneficiosas ya que ayudan al control de plagas y a mantener el equilibrio en las poblaciones de los insectos que depredan.
Dentro de esta familia el género Thomisus Walckenaer, 1805 tiene de momento mas de 100 especies descritas que varían ampliamente en su ecología. Son especies de pequeño tamaño siendo las hembras que miden entre 4-10 mm, mas grandes que los machos.
En la mayoría de especies las hembras miden cuatro a diez mm de largo, mientras los machos miden dos a siete mm. Algunas de las especies florícolas cambian su color corporal a juego con la flor en la que se emboscan para esperar a su presa a modo de camuflaje. Estos cambios de color suelen ser en los rangos del blanco, amarillo o rosa. Sin embargo hay especies que reflejan la luz ultravioleta, mientras la flor la absorbe, creando un contraste entre la araña y la flor a los ojos del polinizador para de esta manera atraerlos a la flor.
El género Thomisus se distribuye en casi todo el mundo, con la notable excepción de la mayor parte de Sudamérica. La mayoría de especies se localizan en los trópicos y las regiones calientes del Viejo Mundo, mientras que pocas especies se encuentran en la región de Nueva Guinea y Australia, además del Nuevo Mundo. En la Península ibérica tenemos dos especies del género:
La familia Thomisidae se reparte por todo el mundo. Cuenta con más de 2.500 especies conocidas que no representan peligro para el ser humano. Al contrario, son beneficiosas ya que ayudan al control de plagas y a mantener el equilibrio en las poblaciones de los insectos que depredan.
Dentro de esta familia el género Thomisus Walckenaer, 1805 tiene de momento mas de 100 especies descritas que varían ampliamente en su ecología. Son especies de pequeño tamaño siendo las hembras que miden entre 4-10 mm, mas grandes que los machos.
En la mayoría de especies las hembras miden cuatro a diez mm de largo, mientras los machos miden dos a siete mm. Algunas de las especies florícolas cambian su color corporal a juego con la flor en la que se emboscan para esperar a su presa a modo de camuflaje. Estos cambios de color suelen ser en los rangos del blanco, amarillo o rosa. Sin embargo hay especies que reflejan la luz ultravioleta, mientras la flor la absorbe, creando un contraste entre la araña y la flor a los ojos del polinizador para de esta manera atraerlos a la flor.
El género Thomisus se distribuye en casi todo el mundo, con la notable excepción de la mayor parte de Sudamérica. La mayoría de especies se localizan en los trópicos y las regiones calientes del Viejo Mundo, mientras que pocas especies se encuentran en la región de Nueva Guinea y Australia, además del Nuevo Mundo. En la Península ibérica tenemos dos especies del género:
- Thomisus citrinellus Simon, 1875
- Thomisus onustus Walckenaer, 1805
Thomisus onustus Walckenaer, 1805
Thomisus deriva del griego “thomigx, -igos” que significa cuerda. Según Eugène Simon, 1864, la palabra derivaría del griego “zoomisoo” que significa, enlazar. Onustus deriva del latín “onustus, -a, -um” que significa, cargado o cubierto.
Esta araña se distribuye por toda la Península Ibérica, y es activa en los meses de primavera y verano coincidiendo con la abundancia de flores e insectos. Habita en lugares soleados y abiertos con vegetación no demasiado escasa, como pastizales secos con plantas altas y floridas, prados o márgenes de caminos.
Thomisus onustus muestra un dimorfismo sexual muy marcado siendo los machos adultos mucho mas pequeños que las hembras ( 2 a 4 milímetros frente a los 7 a 10 mm de longitud de las hembras), el color básico del prosoma varía de color amarillo pardusco a pardo oscuro, el del opistosoma puede ser amarillo y verde o marrón y la tibia y los tarsos de los dos pares de patas delanteras son más oscuros que los de las hembras. Las hembras tienen una coloración de fondo que puede ser blanca, amarilla o rosa, según la flor en la que se encuentren. Ambos sexos tiene los cantos posteriores del opistoma formando ángulos muy marcados, dándole una forma aparentemente trapezoidal y dos tubérculos laterales en la parte anterior, donde la araña tiene los ojos laterales. En total tienen 8 ojos distribuidos en dos filas curvadas y que les permiten ver lo que se encuentra a una distancia de hasta 20 cm. En la hembra el prosoma tiene tres franjas longitudinales anchas, a modo de una bandera en la que las franjas laterales son más oscuras y en el opistoma es frecuente encontrar una especie de “V” en el triángulo anterior, con vértice hacia la región cefálica, formada por puntos blancos (5 normalmente). Los dos primeros pares de patas suelen ser más oscuros y más uniformes en cuanto a su coloración. Las patas más pequeñas (los otros dos pares) son más claras y están débilmente anilladas. Sus dos pares de patas anteriores son más largas que las dos posteriores como es habitual en las arañas cangrejo y las dispone perpendiculares al cuerpo en cuanto se siente amenazada, eso, si no se tira al suelo para hacerse la muerta.
El cambio de color que transforma a Thomisus onustus en blanca, rosa o amarilla, para mimetizarse con la flor en la que esté, tarda un par de días en hacerse efectivo. Se supone que el mecanismo de cambio de color, por lo menos en lo que respecta al blanco y el amarillo, puede ser el mismo que el de Misumena vatia, pero también es muy probable que el color rosa y el amarillo se deban a un pigmento secretado en la superficie. La aparición del color amarillo y el rosa a la vez en un mismo individuo muestra que ambos colores se pueden formar en el mismo animal. Pero un cambio directo de amarillo a rosa y viceversa, no es posible, sino que debe tener lugar siempre por medio de una fase intermedia.
Sus presas son insectos polinizadores de flores (sírfidos, abejas, avispas, mariposas o escarabajos) que a menudo son varias veces más grandes que ellas. Agarran sus presas con los dos pares de patas delanteras y les inoculan un veneno neurotóxico potente con sus quelíceros, generalmente en el cuello, para que llegue el veneno mas rápido al sistema nervioso central. Las crías recién eclosionadas de Thomisus onustus pueden alimentarse de polen o néctar cuando los insectos son escasos.
Para aparearse el macho se sube a la parte posterior de la hembra para copular y desde allí desciende a la parte ventral y anterior del opistosoma introduciendo un pedipalpo en las aberturas genitales de la hembra y después el otro. Al terminar este proceso, hace una pausa y sube de nuevo en la parte posterior de la hembra, para posteriormente repetir el proceso de la cópula. Finalizada ésta, el macho abandona la hembra.
Thomisus
onustus hembra en una flor de Arnica montana
Thomisus
onustus hembra en una flor de Arnica montana
Thomisus
onustus hembra en una flor de Arnica montana
Thomisus
onustus hembra en una flor de Arnica montana
Thomisus
onustus hembra en una flor de Arnica montana
Thomisus
onustus hembra en una flor de Arnica montana
Thomisus
onustus hembra en una flor de Arnica montana
Thomisus
onustus hembra cazando en una flor de Arnica montana
Thomisus
onustus hembra cazando en una flor de Arnica montana
Cópula de Thomisus
onustus
Cópula de Thomisus
onustus
Hembra
de Thomisus onustus. Todavía no adquirió el color de la flor de
Arnica montana
Hembra
de Thomisus onustus. Todavía no adquirió el color de la flor de
Arnica montana
Hembra de Thomisus onustus. Todavía no adquirió el color de la flor de Arnica montana
Hembra de Thomisus onustus. Todavía no adquirió el color de la flor de Arnica montana
Thomisus onustus esperando expectante lo que le venga desde arriba
Thomisus onustus, ¿lo de doblar el pétalo será algún truco?
Thomisus onustus mirando con sus ocho ojitos lo que le viene desde arriba
Thomisus onustus en perfecto plano cenital