Hoy describiré a un coleóptero Tenebrionoideo, es decir:
Reino Animalia
Filo Arthropoda
Subfilo Hexapoda
Clase Insecta
Subclase Pterygota
Orden Coleóptera
Suborden Polyphaga
Infraorden Cucujiformia
Superfamilia Tenebrionoidea
La superfamila Tenebrionoidea se caracteriza por tener cinco artejos en los tarsos anteriores y medios, y cuatro en los posteriores (fórmula tarsal 5-5-4). Una de las Familias que engloba esta superfamilia es la familia Tenebrionidae, que si recordamos, la clasificábamos en las siguientes subfamilias:
•Subfamilia Alleculinae
•Subfamilia Cossyphodinae
•Subfamilia Diaperinae
•Subfamilia Lagriinae
•Subfamilia Nilioninae
•Subfamilia Phrenapatinae
•Subfamilia Pimeliinae
•Subfamilia Stenochiinae
•Subfamilia Tenebrioninae
•Subfamilia Zolodininae
La Subfamilia Tenebrioninaae la subdividimos en las siguientes tribus: Acropteronini, Alphitobiini, Amarygmini, Amphidorini, Apocryphini, Blaptini, Bolitophagini, Centronopini, Cerenopini, Cyphaleini, Dissonomini, Eulabini, Heleini, Helopini, Helopinini, Melanimini, Opatrini, Palorini, Paoligenini, Pedinini, Platyscelidini, Praeugenini, Rhysopaussini, Scaurini, Scotobiini, Tenebrionini, Titaenini, Toxicini, Triboliini, Ulomini, quedando en Incertae sedislos géneros: Aphtora y Lepispilus.
La Tribu Blaptini la dividimos en las siguientes Subtribus
Subtribus Blaptina
Subtribus Gnaptorina
Subtribus Gnaptorinina
Subtribus Prosodina
Subtribus Remipedellina
La tribu de los Blaptini Leach, 1815, perteneciente a la gran familia Tenebrionidae está representada en la peninsula Ibérica únicamente por el género Blaps Fabricius 1775, originalmente denominado como Tenebrio Linnaeus, 1758.
Género Blaps Fabricius 1775
Los representantes de este género, los Blaps, presentan una distribución paleártica, son oriundos de Asia Central, territorio que se considera su centro de dispersión. En la Península Ibérica este género está representado por 10 especies, repartidas prácticamente por todo el país, diferenciándose dos secciones (Allard 1880) en función de su morfología externa.
1) Sección primera de Allard
• especies de tamaño medio mayor a 30 mm
• pronoto mas o menos convexo en el disco, punteado circular, fino y disperso
• Oniquio con plántula triangular aguzada
Blaps hispanica Laporte, 1840
Blaps hispanica ssp. lugens Seidlitz, 1893
Blaps lusitánica Herbst, 1799
Blaps lusitánica ssp. ceballosi Koch, 1944
Blaps lusitánica ssp.Blaps mequignoni Koch, 1944
Blaps lusitánica ssp. Blaps españoli Koch, 1944
Blaps gigas (Linnaeus 1767)
Blaps nitens ssp. branchyura Kuster, 1848
Blaps waltli Seidlitz, 1893
Blaps tichyi Martinez, 2010
Blaps bedeli ssp. torressalai Español, 1961
2) Sección segunda de Allard
• Pronoto mas plano, puntuación circular mas gruesa, oblonga o formando fosetas y densa
• Oniquio con plántula redondeada y en ocasiones truncada
Blaps mucronata Latreille, 1840
Blaps lethifera Marsham, 1902
Blaps gibba Laporte, 1840
El estudio de las numerosas especies de Blaps es muy complicado, no existiendo un consenso entre los especialistas para describir los nuevos taxones. Koch en 1944 describe tres razas geográficas para Blaps lusitánica Herbst, 1799 teniendo estatus de subespecies (ssp. ceballosi, ssp. mequignoni y ssp. Españoli). Según Español (1961) y Viñolas (1989) hay que descartar la validez a nivel subespecífico de estas razas propuestas por Koch, mientras que Löbl y Smetana (2008) mantienen su estatuto de subespecies. Blaps lugens Seidlitz, 1893 descrita como una raza de Blaps hispánica Laporte, 1840 es tratada como una simple forma sin valor específico por Español y Viñolas y actualmente se cita como especie propia por Löbl y Smetana.
Los estudios modernos de los Blaps en los que se incluye el estudio de la genitalia y no se clasifican simplemente por el estudio de la morfología externa, ha hecho que muchas especies descritas con anterioridad por grandes entomólogos sufran actualmente cambios de rango y algunas especies pasen de especie a subespecie y viceversa. Habitualmente, con la familia Tenebrionidae en general y con el género Blaps en particular, es preferible trabajar con el sexo masculino ya que las hembras, en algunos taxones, son difíciles de diferenciar.
Los Blaps son escarabajos de color negro uniforme y exoesqueleto brillante, con las patas traseras un poco mas anchas que las otras cuatro, y con los élitros terminados en punta (lo que se llama mucrón). La terminación del abdomen en una punta es característica de la especie. Las patas son anchas y fuertes, lo que causa que el cuerpo se vea separado del suelo cuando el insecto camina.
Son animales de movimientos lentos, de caminar algo torpe, como si les costara calcular cual de sus seis patas es la que tienen que mover para iniciar la marcha.
Como la mayoría de especies de Tenebriónidos, los hábitos alimenticios de los Blaps son saprófagos, pudiendo presentar en algunos casos cierta tendencia a la coprofagia. Al parecer no hacen ascos tampoco a alimentos de manufactura humana como pan, quesos y embutidos.
Sus hábitos son principalmente nocturnos aunque no resulta difícil observarlos deambular por el campo en pleno día. Son frecuentes en entornos humanizados aunque es muy raro verlos a no ser que sea en bodegas y sótanos y a horas nocturnas. Durante el día se esconden entre ramas, piedras y hojarasca.
Todas las especies del género Blasp tienen la particularidad de emitir, al cogerlas, una secreción de olor penetrante y muy desagradable, que resulta un hábito de disuasión para posibles depredadores (especialmente ratas y ratones) y que actúa también como un mecanismo de atracción hacia otros miembros de la misma especie. En caso de ser molestados adoptan una curiosa postura tratando de esconder su cabeza al mismo tiempo que levantan el abdomen, lo que produce una cierta sensación de amenaza para el observador.
Una curiosa característica de especie B. mortisaga es su capacidad de "Tanatosis", es decir de fingir la muerte. Para hacer esto, el escarabajo se pone patas arriba, en posición rígida, con todas las extremidades estiradas, permaneciendo absolutamente inmóvil, hasta 15 minutos y 40 segundos. Este comportamiento parece mas atenuado en B. lethifera y es dudosa su existencia en otros congéneres. Respecto a B. mortisaga en el folclore de las creencias populares escandinavas la presencia de este escarabajo en una casa, era un presagio nefasto, un anuncio de muerte para los habitantes. Esta superstición ha sido recogida por Fabricius (1775) que creó el género precisamente utilizando el verbo griego "blapto, blapsis, -eos", perjudicar o dañar, intentando dar el sentido al sustantivo derivado "Blaps" de "maleficio o daño brujeril". Debido a esto, varios autores, siguiendo el ejemplo de Linnaeus, dieron a algunas especies de Blaps nombres siniestros como B lethifera Marsham, 1802, B. fatídica Steven, 1807, B. ominosa Menetries, 1832, B. supestitiosa Erichson, 1841, etc. La facultad de adoptar el rigor mortis así como su hábitus, que según diversos testimonios recuerda el frac de los funcionarios suecos de pompas fúnebres, pueden explicar esta creencia popular. Por otra parte,la presencia de Blaps en una casa que normalmente pasaría inadvertida, mientras hubiese roedores acumulando granos entre los tabiques en el interior de las paredes, indica una falta de recursos, que puede efectivamente coincidir con otros síntomas fatales.
La otra noche, cerca de la bodega de casa, mi mujer encontró un escarabajo muerto patas arriba. Pensó que era una vacaloura, también llamado escornabois (Lucanus cervus) y me avisó para que lo viese. Se equivocaba, era un Blaps. Lo recogí y al día siguiente lo llevé a donde lo encontramos para hacerle alguna foto con luz del día.
A la mínima que se veía molestado, levantaba el cuerpo y agachaba la cabeza
y al rato se dejaba caer patas arriba para fingir estar muerto durante largos periodos de tiempo.
Entre los Blaps macho hay algunos que presentan un mechón de pelo entre el primer y segundo tergito abdominales, lo que nos permitiría una primera separación en dos grupos para su identificación. Este era el caso de mi especimen, con lo cual podemos aplicar para su identificación la siguiente clave dicotómica:Clave para diferenciar los machos de las especies Ibéricas con mechón de la primera sección de Allard
1. Edeago ensanchado y mazudo en la extremidad ..……………………….... B. gigas
1´. Edeago conformado de diferente forma …………………………………... 2
2. Mucrón muy corto, reducido a un pequeño saliente bífido ……………….. B. nitens brachyura
2´. Mucron largo, triangular con las dos puntas unidas y de lados convergentes hasta el ápice ... 3
3. Antenómeros IV-VII cortos y gruesos, mesofémures con la máxima anchura en la zona media, patas robustas ……………………….... B. hispanica
3´. Antenómeros IV_VII largos y delgados, mesofémures rectos, patas gráciles ……... B. barrancoi
* B. hispanica y B. barrancoi se diferencian además por el edeago
Blaps hispánica Laporte, 1840
Esta especie de Blaps es de endemismo Ibérico extendido por las regiones centrales y meriodionales y ha sido citada siempre como perteneciente a Solier, 1848 pero Ardoin (1973) desveló su verdadero estatus, siendo la paternidad de Laporte.
Especie muy controvertida cuyas hembras apenas pueden separarse de las de la especie Blaps lusitánica Herbst, 1799. Se caracteriza por un pronoto y élitros convexos y con puntuación fina y espaciada. Los élitros son ovales con un apéndice caudal (Mucrón) largo, triangular con las dos puntas unidas y de lados convergentes hasta el ápice, y tienen una línea central marcada que sería la soldadura de los élitros que les impide volar.
Las patas son largas gruesas y robustas, con unos mesofémures con la máxima anchura en la zona media.
Los machos de esta especie, como ya expliqué, poseen un mechón de pelos anaranjados entre el primero y segundo esternito abdominal, el cual falta en la especie Blaps lusitánica. Esta posesión de mechón de pelo abdominal en el macho le hace fácilmente separable de Blasp waltli, Blasp tichyi, Blaps lusitánica y Blaps bedeli ssp. Torressalai.
El ejemplar macho de Blaps hispánica que vi el otro día, tenía la pata delantera derecha lesionada, faltándole los dos artejos distales, por lo que la marcha habitualmente lenta, era casi imposible. La verdad es que su caminar era tan lento y torpe que a mi me recordó el de un buzo saliendo de la mar y caminando por la arena de la playa con las aletas puestas