sábado, 3 de noviembre de 2012

Un gato en mi motor

Hace unos dias mi mujer me llamó por teléfono justo antes de cenar y de tener que salir yo hacia el trabajo. El coche se le había quedado súbitamente sin embrague.Supusimos que se había roto, pero algo nos llamaba la atención. Ella notaba que el motor del coche hacia unos días que parecía que perdía potencia y hacia un ruido extraño. Mi mujer llamó a una grua para que llevase el coche al taller, yo fuí a buscarla y después me fuí a trabajar.

La sorpresa la tuvimos dos días después, cuando nos dijeron que el coche tenía el embrague roto, pero que eso no era lo que mas trabajo les había dado, lo mas dificultoso había sido sacar un gato del motor.

Estaba a medio momificar el pobre y al parecer había consumido sus siete vidas de golpe.

Ahora haciendo memoria recordamos haber escuchado noches antes maullar con insistencia a un gato fuera de casa. Nunca averiguamos donde estaba ni como desapareció.
Ahora nos lo imaginamos.

Y ya estoy viendo al puñetero gato haciéndome la burla cuando vayamos a pagar la avería.



Resulta que esto no es tan raro como puede parecer al principio.

La red está llena de noticias que hacen referencia a gatos en motores de automóviles.

Algunos sobreviven.

A otros mas les valía no haber sobrevivido.



En Brasil los hay que llegan a hacer virguerias para sacarlos con vida



 Los gatos mas afortunados, después de morir en accidente de tráfico pueden incluso volar, eso sí, convenientemente transformados en gatocoptero.


 

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