Los
endopterigotos (Endopterygota) son un superorden que incluye a todos
los insectos holometábolos, es decir, con metamorfosis completa y
que por lo tanto tienen un desarrollo que pasa por las tres fases de
larva, pupa e imago y que se caracterizan como grupo por que sus alas
se desarrollan en el interior del cuerpo durante la metamorfosis.
Dentro
de este Superorden Endopterygota englobamos a Hymenoptera,
Coleoptera, Strepsiptera, Raphidioptera, Megaloptera, Neuroptera,
Mecoptera, Siphonaptera, Diptera, Protodiptera, Trichoptera y
Lepidoptera. Además tenemos 2 familias que no sabemos muy bien donde
colocar (Incertae sedis) que son Glosselytrodea y Miomoptera, ambas
extintas, como Protodíptera.
Hoy
me interesan los neurópteros.
Los
insectos pertenecientes al Orden Neuróptera tienen de adultos dos
pares de alas membranosas con numerosas nervaduras que forman un
retículo, de ahí el nombre del Orden pues la palabra Neuroptera
deriva del griego "neûron" que significa "nervio"
y "ptéron" que significa ala.
Los
neurópteros incluían antiguamente tres subórdenes, Megaloptera,
Raphidioptera y Planipennia, pero en la actualidad los dos primeros
se tratan como órdenes independientes, mientras que Planipennia se
considera sinónimo de Neuroptera.
Los
neurópteros adultos tienen además de sus características alas, una
cabeza hipognata con piezas bucales masticadoras. Las antenas son
largas, filiformes y formadas por muchos artejos. Poseen grandes ojos
compuestos. Las patas son largas, normalmente locomotoras aunque en
ocasiones son prensoras. El abdomen es estrecho igual de largo o mas
que el resto del cuerpo, a veces muy largo y delgado dándole al
insecto aspecto de odonato; en otras ocasiones semejan polillas.
Los
neurópteros son mayoritariamente depredadores, aunque algunos
adultos se alimentan de polen. Cazan principalmente otros artrópodos,
como por ejemplo pulgones, por lo que el hombre los utiliza en
ocasiones para luchar contra plagas. En concreto, los cultivadores de
Marihuana conocen muy bien a alguno de estos neuropteros, ya que los
utilizan para control biológico de las plagas de pulgones que
afectan a sus cultivos ;-)
Las
larvas de los neurópteros son de tipo campodeiforme, depredadoras,
muy móviles y activas, con piezas bucales de tipo masticador, pero
muy modificadas para perforar y chupar, con fusión de los palpos
maxilares con las mandíbulas. Producen enzimas digestivas que
inyectan a sus presas y después las succionan; las mandíbulas son
normalmente muy largas y en forma de tenaza. En su último estadio
larvario construyen cápsulas esféricas de seda, secretada por los
tubos de Malpighi modificados; a menudo camuflan esos capullos, donde
pasan el estadio de pupa, cubriéndolos con desechos vegetales o
piedrecillas. En muchos casos las larvas son terrestres, pero también
las hay acuáticas y anfibias. En muchos casos estas larvas muestran
comportamiento de canibalismo, lo que hace difícil su cría.
Los
miembros de este orden que son aproximadamente 5.000 y se agrupan en
6 superfamilias que contienen 16 familias:
Superfamilia
Hemerobioidea
Familia
Chrysopidae Schneider (crisopas verdes)
Familia
Dilaridae Handlirsch
Familia
Hemerobiidae Latreille (crisopas pardas)
Familia
Polystoechotidae
Familia
Psychopsidae
Superfamilia
Coniopterygoidea
Familia
Coniopterygidae Burmeister
Superfamilia
Ithonioidea
Familia
Ithonidae
Superfamilia
Mantispoidea
Familia
Berothidae Handlirsch
Familia
Mantispidae Leach
Superfamilia
Myrmeleontoidea
Familia
Ascalaphidae Rambur
Familia
Myrmeleontidae Latreille
Familia
Nemopteridae Burmeister
Los
crisópidos (Chrysopidae) son los que conocemos vulgarmente como
crisopas, crisopas verdes, crisopas de alas verdes, ojos dorados,
león de áfidos, alas de encaje y hadas bonitas.
Son
más de 1200 especies en aproximadamente 80 géneros válidos
distribuidos en todas las regiones biogeográficas principales en
todo el mundo. Son cosmopolitas en su distribución, habitando
especialmente en zonas de gran vegetación y agrícolas. Sus larvas
son depredadores de otros artrópodos de cuerpo blando y son también
caníbales. La mayoría se alimenta de secreciones proteínicas. La
mayoría son nocturnos o crepusculares, solamente unas pocas especies
son diurnas. Todas emiten señales de alta frecuencia lo que permite
mantener a los individuos cerca entre la espesa vegetación.
Los
adultos son de cuerpo verde a pardo pálido, su venación alar
contrasta en sus dos pares de alas
transparentes,
y sus ojos son dorados o amarillos cobrizos. Poseen aparato bucal
masticador, antenas filiformes multisegmentadas, alas con abundante
venación y casi todas las especies poseen un órgano timpánico que
sirve para evadir a los murciélagos. Las patas son marchadoras. El
abdomen es largo y carece de cercos. Como medio defensivo producen
una sustancia lacrimógena anal cuando huyen de un ataque.
El
cortejo de los crisópidos es complejo y ritual, producen vibraciones
de gran complejidad que únicamente son reconocidas por miembros de
la misma especie. Unas pocas especies producen olores durante el
cortejo. Tanto los machos como las hembras realizan varias cópulas,
las hembras aproximadamente cada 28 días, los machos dos seguidas
cada 5 días como promedio. La cópula es relativamente larga. La
longevidad está relacionada con el tipo de alimentación durante el
período larval, y la capacidad de oviposición y cantidad de huevos
con la misma pero durante el periodo adulto.
Las
hembras ovipositan sobre los troncos de los árboles o sobre hojas,
las puestas pueden ser juntas o solitarias, el huevo posee un
pedúnculo por medio del cual queda adherido y que los protege de la
depredación.
Las
larvas que suelen ser alargadas (compodeiformes) o de abdomen grueso
(campodeiformes), según la especie, todas de cabeza aplanada, de
patas fuertes, y algunas poseen unos tubérculos laterales y dorsales
en el metatórax que usan para cargar escombros vegetales,
piedrecillas y los exoesqueletos de sus víctimas. Poseen estructuras
maxilares unificadas que forman dos piezas puntiaguadas con conductos
como jeringas que utilizan para matar y consumir sus presas. Cuando
escasean sus presas se alimentan también de secreciones como los
adultos.
Durante
su etapa larval sufren dos mudas y tres estadios, seguidos por el
estadio de pupa, construyendo un capullo con secreciones de los tubos
de Malpighi que salen de la apertura anal.
Sufren
la depredación de otros artrópodos, aves y murciélagos, y son
parasitados por varios grupos de insectos, algunos ácaros predadores
y algunos hongos entomopágenos.
A
los crisópidos los agrupamos en cinco subfamilias, con 86 géneros y
1.350 especies
Subfamilia
Mesochrysopinae Handlirsch, 1906
Subfamilia
Notochrysinae Navás, 1910
Subfamilia
Dictyosinae
Subfamilia
Apochrysinae Handlirsch, 1908
Subfamilia
Chrysopinae Schneider, 1851
- Tribu Ankylopterygini
- Tribu Belonopterygini Navás, 1913
- Tribu Chrysopini Schneider, 1851
- Tribu Leucochrysini
Apochrysinae
está representada por seis géneros pantropicales de especies
espectacularmente grandes y delicadas.
Los
Nothochrysinae están representados por nueve géneros en todo el
mundo, y contienen muchas especies que exhiben características
ancestrales putativas.
La abrumadora mayoría de la diversidad
genérica y de nivel de especie pertenece a Chrysopinae, con
aproximadamente el 97% de todas las especies vivas.
Chrysoperla
carnea (Stephens, 1836)
La
palabra Chrysoperla deriva del griego "chrysos, -ou) que
significa oro o dorado y "ops" que significa ojo,
apariencia. Carnea deriva del latín "caro, carnis" que
significa carne, vianda.
Chrysoperla
carnea se consideraba originalmente como una sola especie con una
distribución por todo el holártico, pero recientemente se ha visto
que es un complejo de especies próximas. Su morfología es idéntica,
pero pueden ser reconocidas por las variaciones en las vibraciones de
los sonidos que utilizan para comunicarse entre ellas, sobre todo
durante el cortejo sexual.
Los
adultos de crisopa son de aspecto fragil y delicado y tienen color
verde pálido con largas antenas y ojos compuestos amarillentos. Su
longitud esde 12 y 30 mm, con unas largas y membranosas alas que se
recogen sobre su abdomen.
No
son buenos voladores y tienen un vuelo oscilante. A menudo se les ve
atraídos por las luces artificiales durante la noche.
Se
alimentan de néctar y polen. Pasan el invierno enterrados entre la
hojarasca en los límites de los cultivos o en otros terrenos. En
primavera emergen y se aparean. Cada hembra pone cientos de huevos de
forma ovala un ritmo de dos a cinco al día, depositándolos en zonas
próximas a potenciales presas, sobre todo áfidos, normalmente en
los brotes más jóvenes de las plantas separados o en pequeños
grupos sobre el envés de una hoja, enganchados con un largo peciolo.
La puesta de huevos se realiza normalmente en las horas de oscuridad,
entre los meses de febrero y julio. Tras 3-6 días de la puesta se
produce la eclosión.
Cadáver de Chrysoperla carnea en el dorso de mi mano
Las
larvas al nacer tienen un milímetro de longitud, son de color marrón
y se mueven activamente en busca de presas. Tienen un par de grandes
mandíbulas en forma de pinza con las que apresan a sus víctimas, a
menudo levantándolas en peso para evitar que huyan. Las larvas
inyectan enzimas dentro del cuerpo de sus presas disolviendo sus
órganos internos, tras lo cual la larva absorbe el líquido
resultante del interior del cuerpo de la víctima. No se alimentan
exclusivamente de pulgones sino también de muchos otros tipos de
insectos, incluso de especies mucho mayores que ellas como pueden ser
orugas de mariposas. Pueden consumir gran número de presas y
destruir completamente grandes colonias de pulgones.
Larva de Chrysoperla carnea
Cuando las
presas escasean pueden volverse caníbales. Crecen hasta unos ocho
milímetros de longitud tras lo cual, a las 2-3 semanas elaboran un
capullo en el que pasan al estadio de pupa. Después de entre 10 y 14
días los adultos emergen del capullo. La duración del ciclo
biológico está muy influida por la temperatura y pueden tener
varias generaciones al año en condiciones favorables. En verano la
duración es de unas cuatro semanas.Larva de Chrysoperla carnea
Adendum:
Como
curiosidad os diré ahora que hace unos años y gracias a otro
aficionado a la fotografia de animales que colgaba sus fotos en
Flickr, un entomólogo americano (Shaun L. Winterton, del
Departamento de Alimentación y Agricultura de Californa) que pasaba
su tiempo libre viendo las fotos de bichitos que los aficionados
colgaban en la red, se encontró con una fotografía de un
Nueróptero de la familia Chrysopidae que le llamó mucho la
atención. Nunca había visto una especie con semejantes
características y después de indagar y consultar a colegas llegaron
a la conclusión de que se encontraban ante una nueva especie no
catalogada. En concreto era un especimen perteneciente a la tribu
ankylopterygini, grupo paleotropical caracterizado por Brooks (1983,
1986) y Brooks y Barnard (1990) y diferenciado de otras tribus basado
en la cercanía de las venas Sc y R, mandíbulas estrechas que
carecen de dientes internos y el alargamiento y estrechamiento apical
de el palpo labial y maxilar. El género Semachrysa Brooks, 1983,
perteneciente a esta Tribu, contiene 14 especies descritas
anteriormente de Japón hacia el sur a través de las regiones
oriental y australasia hasta Australia (Brooks 1983, 1986).
Semachrysa se diferencia de otros géneros Ankylopterygini por la
presencia de marcas distintas (es decir, dos o tres puntos) en los
frons, la célula im presente, el antebrazo con un estigma alargado
con 3-4 cruces cruzadas Sc-R y los genitales masculinos con dos pares
de gonosetae (Brooks y Barnard, 1990). Lo que encontraron fue un
ejemplar hembra de una especie nueva y distintiva (Semachrysa jade
sp. N.). El grupo de entomólogos contactó con el fotógrafo que
salio a hacer mas fotos de la aparente nueva especie y volvió con
mas fotos de mas hembras que sirvieron para la publicación del
hallazgo de la nueva especie en la revista Zookey por parte de los
entomólogos. Aquí os dejo el hipervínculo al artículo.
Como
podeis ver, los locos por los animalitos y la fotografía en
ocasiones hacemos cosas geniales ;-)