Como
en la ultima ocasión, repito con otro animal reptil lepidosaurio
escamoso y exótico del Suborden Lacertilia e Infraorden Gekkota, es
decir, otro Gecko.
Reino
Animalia
Filo
Chordata
Clase
Reptilia
Orden
Squamata
Suborden
Lacertilia
Infraorden
Gekkota
El que
desee leer generalidades sobre este infraorden, bien puede consultar
lo que dije cuando introduje al geco diurno de Standing. Ahora
simplemente recordaré que actualmente se distinguen siete familias
dentro del Infraorden Gekkota:
•Familia
Carphodactylidae Kluge, 1987
•Familia
Diplodactylidae Underwood, 1954
•Familia
Eublepharidae Boulenger, 1883
•Familia
Gekkonidae Oppel, 1811
•Familia
Phyllodactylidae Gamble, Bauer, Greenbaum & Jackman, 2008
•Familia
Pygopodidae Boulenger, 1884
•Familia
Sphaerodactylidae Underwood, 1954
Los
eublefáridos (Eublepharidae) también se denominan geckos
párpados porque tienen móviles los párpados y también se
caracterizan porque sus pies carecen de las modificaciones que
permiten a la mayoría de los geckos escalar superficies escarpadas.
Son lagartos nocturnos, se alimentan de insectos y son ovíparos. El
sexo de los jóvenes de algunas de estas especies está determinado
por la temperatura de incubación, como en los cocodrilos. Conocemos
36 especies agrupadas géneros siguientes:
Género
Aeluroscalabotes Boulenger, 1885
Género
Coleonyx Gray, 1845
Género
Eublepharis Gray, 1827
Género
Goniurosaurus Barbour, 1908
Género
Hemitheconyx Stejneger, 1893
Género
Holodactylus Boettger, 1893
Eublepharis
es un género que incluye a las siguientes seis especies:
Eublepharis
angramainyu Anderson & Leviton, 1966.
Eublepharis
fuscus Börner, 1974.
Eublepharis
hardwickii Gray, 1827.
Eublepharis
macularius (Blyth, 1854) - gecko leopardo.
Eublepharis
satpuraensis Mirza, Sanap, Raju, Gawai & Ghadekar, 2014.
Eublepharis
turcmenicus Darevsky, 1977.
Eublepharis
macularius (Blyth, 1854)
La
palabra Eublepharis deriva del griego “eu” que significa bien o
normal + “blepharon” que significa pestaña. Macularis deriva del
latín “macula, ae” que significa tara o mancha.
A este
gecko se le conoce con el nombre vulgar de geco leopardo.
Se
reconocen las siguientes subespecies de Eublepharis macularius
- Eublepharis macularius afghanicus Börner, 197
- Eublepharis macularius fasciolatus Günther, 1864
- Eublepharis macularius macularius Blyth, 1854
- Eublepharis macularius montanus Börner, 1976
- Eublepharis macularius smithi Börner, 1981
Viven
en las zonas desérticas y semidesérticas de Asia Menor, desde el
noroeste de India hasta el este de Afganistán y el este de Irán,
así como en la mayor parte de Pakistán. Eublepharis macularius
habita en zonas rocosas con vegetación rala y bosques secos, en
cotas que van desde el nivel del mar hasta los 2.500m de altitud.
Viven
principalmente regiones calurosas y con grandes variaciones de
temperatura entre el día y la noche. Es un reptil de actividad
principalmente crepuscular y nocturna. Comienzan su actividad al
atardecer, con el inicio del crepúsculo. De día descansan bajo
grandes piedras, en muros semiderruidos, tuberías enterradas bajo
tierra, etc. siempre a una profundidad adecuada para pasar el exceso
de calor y en el sustrato ligeramente humedecido. Su mayor actividad
se concentra en las noches más cálidas y húmedas. Suelen vivir en
colonias. Los machos mantienen en cautividad los grupos de cría
conformados por un solo macho y varias hembras.
Su
tamaño total es de unos 18-24 cm, siendo la cola un tercio de la
longitud total. Presentan una cabeza triangular, alargada hacia el
morro, con la zona de las sienes más ancha. A los lados se aprecian
con claridad los tímpanos de los oídos, que son casi transparentes.
Los grandes ojos tienen la pupila vertical y suelen ser verdes.
Tienen párpados completos. Tienen un cuerpo robusto, alargado, con
extremidades fuertes y adaptadas a la vida terrestre, terminadas en 5
dedos. Carecen de las clásicas lamellas o almohadillas adhesivas de
los dedos que otros geckos tienen para subir por superficies lisas e
incluso andar boca abajo por un cristal. Eublepharis macularius tiene
también los denominados bolsillos o huecos axilares, unas curiosas
y pequeñas cavidades tras la axila de las patas delanteras. Ambos
sexos tienen de 10 a 14 poros femorales, muy bien marcados en los
machos. Otra característica típica es el patrón de máculas
(manchas) oscuras sobre un fondo amarillo anaranjado (sus fases
patrones son infinitos y únicos en el mundo). La fase común o
salvaje es la que se encuentra normalmente en la naturaleza y es un
fondo blanco amarillento o de color crema, con numerosas manchas
pardas o negruzcas y aspecto verrugoso. Su piel es lisa salpicada
irregularmente de escamas tuberculares. No así en los geckos recién
nacidos, cuyo patrón de color consta de un bandeado como el de una
avispa; si bien con el crecimiento enseguida las bandas negras se
diseminan en forma de los característicos puntos de los adultos.
Tienen una cola fuerte y musculosa, en la que almacenan grasas para
su descanso invernal, durante el que permanecen unos dos meses sin
ingerir alimento. La cola aparte de deposito de reservas tiene
capacidad de autotomía. Con el tiempo la cola perdida vuelve a
formarse aunque adquiere unos tonos oscuros teniendo poco o nada que
ver con los colores de la original incluso siendo su forma menos
estilizada pasando a ser algo atrofiada pero con las mismas
cualidades que la original. Los machos adultos tienen unos marcados
poros femorales y un abultamiento visible en la base de la cola,
además, éstos son generalmente algo más grandes que las hembras.
Los
morphos o fases de color mas conocidas conseguidas a partir de cruces
son:
- Normal: La fase primitiva u original que es de la que parten todas las demás siendo su color base un amarillo más o menos intenso con puntos negros distribuidos a lo largo del cuerpo.
- High yellow: Predominio del amarillo como su nombre indica.
- Pastel: Total desaparición del negro en su coloración sustituyéndola por tonos mas claros o pasteles.
- Selva (Jungle): Una fase con rayas y líneas quebradas. Al tener unos diseños poco claros no aseguran que los progenitores obtengan una descendencia clara de la fase “selva”.
- Nieve (Snow): Nos encontramos, haciendo gala de su nombre a la coloración más selectiva o extrema de los geckos predominando el blanco en todo el ejemplar, no obstante en la etapa adulta es posible que desarrollen un tono amarillento.
- Ventisca (Blizzard): Es el verdadero Eublepharis macularius “leucistico” puro, hay quien lo denomina también “plátano”.
El
gecko leopardo es un animal prácticamente insectívoro dando buena
cuenta de los grillos, langostas, gusanos de seda, saltamontes,
arañas, coleópteros, así como de otros saurios que puedan dominar
y comer. En cautividad algunos geckos leopardo también pueden
aceptar ocasionalmente la fruta madura (raramente), huevos o crías
de roedores o pájaros, aunque no hay constancia de que estos formen
parte de su dieta en estado salvaje.
Los
gecko leopardo alcanzan la madurez sexual antes del año de vida los
machos y las hembras en torno a los dos años.
Tanto
los machos como las hembras, son capaces de excretar señales
quimicas que utilizan para identificarse sexualmente entre si, y que
se cree son una respuesta que evoluciono inicialmente como un
mecanismo para evitar la perdida de líquidos en ambientes áridos
(Mason y Gutzke, 1990)
Tres o
cuatro semanas después del apareamiento las hembras estarán listas
para desovar dos huevos en un ponedero húmedo y algo profundo
(3-5cm). Estos huevos son ovalados y de cascara blanda y muy
permeables, grandes, con una longitud media de 33mm. En condiciones
ideales pueden llegar a hacer hasta diez puestas de dos o tres huevos
de cáscara relativamente blanda a lo largo del año, tras un único
apareamiento (amphigonia retardata). En esta especie, la temperatura
de incubación determina el sexo de las crías.
-Los
huevos incubados a 30º C producen una proporción de 25% machos y
75% hembras.
-Los
huevos incubados a 32.5º C producen una proporción de 25% hembras y
75% machos.
A
temperaturas mayores hay que tener mucho cuidado porque podemos dar
lugar a “hembras calientes”. Las hembras incubadas a altas
temperaturas, suelen mostrar comportamientos mas agresivos, y su
respuesta a la testosterona es diferente a la de hembras incubadas a
bajas temperaturas. Algunas de estas hembras pueden, incluso, mostrar
un comportamiento agresivo con los machos, y viceversa.