El
Suborden Polyphaga, el más amplio y diverso de los coleópteros con
mas de 300.000 especies y del que ya hemos visto unos cuantos
representantes, se divide en cinco infraordenes:
-
Bostrichiformia
-
Scarabaeiformia
-
Staphyliniformia
-
Elateriformia
-
Cucujiformia
Elateriformia
y cucujiformia tienen dos especies que son prácticamente
indistinguibles, por eso hablaré de las dos, una a continuación de
otra.
CUCUJIFORMIA
Como
sabemos el infraorden Cucujiformia se subdivide en
-
superfamilia Chrysomeloidea (con 4 familias)
-
superfamilia Cleroidea (con 8 familias),
-
superfamilia Cucujoidea (con 31 familias)
-
Superfamilia Curculionoidea (con 8 familias)
-
Superfamilia Lymexyloidea (con 1 familia)
-
Superfamilia Tenebrionoidea (con 30 familias)
A
nosotros nos interesa ahora la última superfamilia, la Tenebroidea.
Ya
he hablado en alguna ocasión de los tenebrionoideos y dije que son
una superfamilia de coleópteros polífagos que se distribuyen por
todo mundo adelante y suelen tener cinco artejos en los tarsos
anteriores y medios, y cuatro en los posteriores (fórmula tarsal
5-5-4). La superfamilia Tenebrionoidea incluye las siguientes
familias:
Aderidae
Winkler, 1927
Anthicidae
Latreille, 1819
Archeocrypticidae
Kaszab, 1964
Boridae
C. G. Thomson, 1859
Chalcodryidae
Watt, 1974
Ciidae
Leach, 1819
Colydiidae
Erichson, 1842
Melandryidae
Leach, 1815
Meloidae
Gyllenhal, 1810
Monommatidae
Blanchard, 1845
Mordellidae
Latreille, 1802
Mycetophagidae
Leach, 1815
Mycteridae
Blanchard, 1845
Oedemeridae
Latreille, 1810
Perimylopidae
St. George, 1939
Prostomidae
C. G. Thomson, 1859
Pterogeniidae
Crowson, 1953
Pyrochroidae
Latreille, 1807
Pythidae
Solier, 1834
Ripiphoridae
Gemminger and Harold, 1870
Salpingidae
Leach, 1815
Scraptiidae
Mulsant, 1856
Stenotrachelidae
C. G. Thomson, 1859
Synchroidae
Lacordaire, 1859
Tenebrionidae
Latreille, 1802
Tetratomidae
Billberg, 1820
Trachelostenidae
Lacordaire, 1859
Trictenotomidae
Blanchard, 1845
Ulodidae
Pascoe, 1869
Zopheridae
Solier, 1834
De
estas familias nos quedamos ahora con los meloidos.
La
Comisión Internacional de Nomenclatura Zoológica (ICZN, 1999)
otorgó prioridad para esta familia al nombre Meloidae Gyllenhal,
1810, sobre Horiidae Latreille, 1802.
Son
una familia con unas 2.500 especies en todo el mundo. La familia
Meloidae Gyllenhal, 1810 comprende en la actualidad 64 especies en la
península Ibérica y Baleares, agrupadas en 18 géneros
pertenecientes a las dos subfamilias —Meloinae Gyllenhal, 1810 y
Nemognathinae Cockerell, 1910— representadas en la región
paleártica.
Varios
aspectos hacen de los meloidos un grupo peculiar e interesante:
1.-
Producen cantaridina, un veneno del que ya he hablado cuando comenté
cosas sobre Lytta vesicatoria. Una curiosidad que no dije entonces y
aprovecho para comentar ahora es que en ocasiones estos insectos
muertos contaminan la alfalfa almacenada con cantaridina e intoxican
al ganado.
2.-
Los meloidos sufren hipermetamorfosis. Su primer estadio larval es
llamado planidio y es más activo que los estadios subsiguientes,
generalmente con ojos y patas que pierden en estadios posteriores.
Las larvas atacan principalmente a las abejas, pero también
parasitan huevos de saltamontes. Si bien algunas veces son
considerados parásitos, no lo son realmente puesto que aun cuando se
alimentan de su huésped y de las provisiones de este, son capaces de
sobrevivir con solo las provisiones del mismo. Es más apropiado
llamarlos cleptoparásitos.
Los
adultos en cambio se alimentan de flores y hojas, entre otras
familias: Amaranthaceae, Asteraceae, Fabaceae y Solanaceae.
La
familia Meloidae se divide en cuatro subfamilias: Eleticinae,
Meloinae, Nemognathinae y Tetraonycinae. En la Península Ibérica
tenemos representantes de solo dos subfamilias: Meloinae y
Nemonagnathinae. El especimen que nos atañe es de la subfamilia
Nemognathinae y dentro de esta se encuentra en la tribu
Nemognathini.
En
el área Ibero-Balear podemos encontrar especies de los siguientes
géneros de la tribu Nemognathini Laporte, 1840
Género
Apalus Fabricius, 1775
Género
Euzonitis Semenov, 1893
Género
Leptopalpus Guérin–Méneville, 1834
Género
Nemognatha Illiger, 1807
Género
Sitaris Latreille, 1802
Género
Sitarobrachys Reitter, 1883
Género
Stenoria Mulsant, 1857
Género
Zonitis Fabricius, 1775
El
género Género Zonitis (Fabricius, 1775) incluye muchísimas
especies, entre ellas
Zonitis
flava Fabricius, 1775
Si
atendemos a los sinónimos que ha tenido esta especie, nos daremos
rápidamente cuenta que los meloideos ofrecen un verdadero problema
taxonómico. Podemos encontrar referencias a esta especie con la
siguiente laraga lista de sinónimos: Mylabris testacea (Fabricius,
1781), Apalus testaceus (Fabricius, 1781), Zonitis praeusta
(Fabricius, 1792), Zonitis nigripennis (Fabricius, 1798), Zonitis
thoracica (Laporte, 1840), Zonitis scutellata (Motschulsky, 1872),
Zonitis nigripes (Motschulsky, 1872), Zonitis impressicollis
(Motschulsky, 1872), Zonitis analis (Abeille de Perrin, 1880),
Zonitis praeusta ancoroides (Escherich, 1892), Zonitis praeusta
fusciventris (Rey, 1892), Zonitis praeusta unicolor (Ragusa, 1898),
Zonitis analis hipponensis (Pic, 1900), Zonitis analis signatithorax
(Pic, 1900), Zonitis praeusta flaviventris (Müller, 1902), Zonitis
praeusta nigripes (Müller, 1902), Zonitis praeusta nigrithorax (Pic,
1904), Zonitis praeusta sophiensis (Nedelkov, 1905), Zonitis flava
obscuriceps (Pic, 1907), Zonitis praeusta melanopus (Wellman, 1910),
Zonitis flava atripes (Reitter, 1911), Zonitis praeusta inscutellaris
(Pic, 1922), Zonitis praeusta moltonii (Schatzmayr, 1941), Zonitis
praeusta semiobscura (Schatzmayr, 1941), Zonitis praeusta atriventris
(Pic, 1951), Zonitis praeusta latenigra (Pic, 1951), Zonitis praeusta
metasternalis (Csiki, 1953), Zonitis praeusta gaditana (Pardo
Alcaide, 1956), Zonitis praeusta nigriceps (Pardo Alcaide, 1956),
Zonitis praeusta ramirezi (Pardo Alcaide, 1956), Zonitis praeusta
metasternaloides (Kaszab, 1958) y Zonitis praeusta reitteri (Kaszab,
1958).
Esta
especie se extiende por el extremo noroccidental de África, sur de
Europa, Rusia meridional, Asia Menor, Cáucaso y Asia central
(Bologna, 1991, 2008).
Repartida
por buena parte del territorio ibero–balear, ocupando la práctica
totalidad de la mitad este peninsular. Señalada en la mayoría de
citas y registros antiguos como Z. praeusta Fabricius o Z.
nigripennis Fabricius.
Para
nuestro fastidio, hay otro género llamado directamente Nemognatha,
también con muchísimas especies, del que son muy difíciles de
diferenciar estos Zonitis, a no ser que se observe el aedeagus o
edeago, que es el órgano copulador de los insectos machos a través
del cual secretan el esperma desde los testículos durante la cópula
con la hembra.
Por
cierto y ya que estamos con el tema, es interesante resaltar que el
esperma de los artrópodos pasa a la hembra en forma de cápsulas
denominadas espermatóforos que encierran los espermatozoides. Además
de los espermatóforos, en algunas especies el aedeagus también
descarga spermatophylax, una bola de secreciones nutrientes para
ayudar a la hembra a alimentar a la descendencia.
Pues
bien, volviendo a nuestro Zonitis flavus, diremos que este coleóptero
meloideo es de pequeño tamaño, con cabeza y tórax de color
naranja. Precisamente de ahí le viene lo de “flava” pues este
término deriva del latín "flavus, -a, -um" que significa
amarillo o rubio.
Sus
élitros pueden ser anaranjados o pardos, con el ápice oscuro. En
ocasiones son totalmente oscuros, con pubescencia dorada. Las tibias
son oscuras en su parte distal, con dos espinas metatibiales, siendo
la frontal plana.
Curiosamente
y aunque en su estado adulto son vegetarianas, en su estados
iniciales de larva, crecen y se alimentan dentro de huevos de otras
especies, abejas o saltamontes por ejemplo.
ELATERIFORMIA
El
infraorden Elaterioformia tiene las siguientes subfamilias
Superfamilia
Buprestoidea
Superfamilia
Byrrhoidea
Superfamilia
Dascilloidea
Superfamilia
Scirtoidea
Superfamilia
Elateroidea
Y
la Subfamilia Elateroidea, engloba las siguientes familias:
Artematopodidae
(Lacordaire, 1857)
Brachypsectridae
(Leconte & Horn, 1883)
Cantharidae
(Imhoff, 1856)
Cerophytidae
(Latreille, 1834
Drilidae
(Blanchard, 1845)
Elateridae
(Leach, 181
Lampyridae
(Rafinesque, 1815)
Lycidae
(Laporte de Castelnau, 1836)
Melasidae
(Leach, 1817)
Omalisidae
(Lacordaire, 1857)
Omethidae
(LeConte, 1861)
Phengodidae
(LeConte 1861)
Plastoceridae
(Crowson, 1972)
Rhagophthalmidae
(E. Olivier, 1907)
Rhinorhipidae
(Lawrence, 1988)
Throscidae
(Laporte, 1840)
Telegeusidae
(Leng, 1920)
†Praelateriidae
(Dolin, 1973)
†Berendtimiridae
(Winkler, 1987)
Es
precisamente Cantharidae (Imhoff, 1856) la que contiene la Subfamilia
Cantarinae que contiene los siguientes géneros repartidos en dos
tribus:
Tribus
Cantharini
Ancistronycha
Armidia
Atalantycha
Athemus
Boveycantharis
Cantharis
Cantharomorphus
Cordicantharis
Cratosilis
Cultellunguis
Cyrtomoptera
Metacantharis
Occathemus
Pakabsidia
Podistra
Rhagonycha
Rhaxonycha
Sinometa
Themus
Tribu
Podabrini
Asiopodabrus
Dichelotarsus
Hatchiana
Micropodabrus
Podabrus
Además
tenemos dos géneros incertae sedis ya extintos: †Hoffeinsensia -
†Sucinocantharis
Se
estima que el número de especies de cantáridos en la Península
Ibérica es de más de 130
El
Género Rhagonycha, Eschscholtz, 1830 es el que tiene la especie que
es igualita que Zonitis flavus.
Rhagonycha
fulva (Scopoli,
1763)
Esta
especie fue descrita por el entomólogo italiano
Giovanni Antonio Scopoli en 1763. Nosotros
la conocemos como coracero rojo, nombre
adoptado del ámbito militar,
donde significa “soldado,
especialmente de caballeria, armado con coraza”.
El
término Rhagonycha deriva
del griego”rhagos, ou”
que significa
racimo, uva y de
“onyx, onykos” que
significa uña. Fulva
deriva del latín “fulvus,
-a, -um” que significa
dorado, amarillo.
Sinónimos:
Cantharis fulva, Telephorus
bimaculatus DeGeer, 1774, Cicindela maculata Fourcroy, 1785,
Telephorus melanurus Olivier, 1790, Rhagonycha terminalis
Redtenbacher, 1849, Rhagonycha cailloli Chobaut, 1914, Rhagonycha
curtithorax Pic, 1920
Se
distribuyen por las regiones templadas de Europa y Asia (Anatolia),
y ha sido introducido en América del Norte.
Los
adultos se dejan ver entre mayo y agosto, omnipresente
en los prados y en los márgenes de los caminos. Lo encontrámos
básicamente en las flores de umbelíferas, acompañado por mariposas
y abejas. Solo está activo durante el día y vuela como una mosca de
flor en flor, en busca de polen y completando a menudo su régimen
con un pulgón si se le presenta la ocasión.
Se
trata de un escarabajo de 7-10
mm de longitud, con el cuerpo
plano y alargado, y una coloración ocre rojiza, con una tonalidad
débilmente negruzca en la punta de los élitros y tarsos.
Los élitros son suaves y poco queratinizados. Las antenas son
filiformes y relativamente largas. La
hembra se reconoce por su abdomen, mucho mas voluminoso que el del
macho. El apareamiento tiene lugar sobre las flores. De hecho,sobre
las umbelíferas se pueden formar múltiples parejas al mismo tiempo.
La
hembra fecundada pone sus huevos en el suelo. La larva, parda
marronácea, de aspecto aterciopelado, permanece durante todo el
invierno sobre las piedras o en cuevas y se transforma en adulto en
la primavera siguiente. Pueden
verse al salir incuso encima de la nieve, lo que les valió el nombre
de gusanos de nieve. Antiguamente se consideraba la presencia de
estos gusanos en la nieve como presagio de mal agüero.
Una
curiosidad es que debido a que poseen un tegumento blando, al morir,
sus élitros tienden a retorcerse por efecto de la desecación. Por
ello, los estudiosos de los coleópteros durante mucho tiempo han
dejado de lado a este insecto debido a su tendencia a “quedar mal”
en las colecciones.
Subespecies:
Rhagonycha
fulva var. delahoni Schilsky, 1908
Rhagonycha
fulva var. inapicalis Fiori, 1914
Rhagonycha
fulva var. usta (Gemminger, 1870)