viernes, 11 de octubre de 2013

Para mi mujer

En ocasiones nos sentimos como mariposas enjauladas, pero meniña, date cuenta que no hay barrotes capaces de retener a una mariposa.




La mariposa volotea
y arde —con el sol— a veces.

Mancha volante y llamarada,
ahora se queda parada
sobre una hoja que la mece.

Me decían: —No tienes nada.
No estás enfermo. Te parece.

Yo tampoco decía nada.
Y pasó el tiempo de las mieses.

Hoy una mano de congoja
llena de otoño el horizonte.
Y hasta de mi alma caen hojas.

Me decían: —No tienes nada.
No estás enfermo. Te parece.

Era la hora de las espigas.
El sol, ahora,
convalece.

Todo se va en la vida, amigos.
Se va o perece.

Se va la mano que te induce.
Se va o perece.

Se va la rosa que desates.
También la boca que te bese.

El agua, la sombra y el vaso.
Se va o perece.

Pasó la hora de las espigas.
El sol, ahora, convalece.

Su lengua tibia me rodea.
También me dice: —Te parece.

La mariposa volotea,
revolotea,
y desaparece.

(Mariposa de otoño - Pablo Neruda)

1 comentario:

  1. "Passa uma Borboleta por diante de Mim
    E pela primeira vez no Universo eu reparo
    Que as borboletas não têm cor nem movimento,
    Assim como as flores não têm perfume nem cor.
    A cor é que tem cor nas asas da borboleta,
    No movimento da borboleta o movimento é que se move,
    O perfume é que tem perfume no perfume da flor.
    A borboleta é apenas borboleta
    E a flor é apenas flor."

    Alberto Caeiro, in "O Guardador de Rebanhos - Poema XL"
    Heterónimo de Fernando Pessoa

    Com carinho
    Beijinhos

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