Ya he hablado en alguna
ocasión de las aves, en concreto de las aves modernas (Subclase
Neornithes) y el Orden Passeriformes; es decir, de algún pájaro.
Dentro del Suborden
Passeri Linnaeus, 1758 que comprende a los pájaros cantores tenemos
a la Familia Sylviidae, una familia que contiene principalmente a
pequeños insectívoros, entre los que se cuentan las currucas, los
picoloros y las fulvetas.
Estos pájaros se
pueden encontrar en muchas partes de Europa, Asia y África. La
mayoría viven en regiones temperadas, suelen tener hábitos
migratorios y se desplazan a regiones cálidas en invierno. Comparten
características comunes tales como su pequeño tamaño, un pico
estrecho y cuerpo esbelto, y sus colores no suelen ser muy
llamativos. No todos tienen claro dimorfismo sexual.
En el
pasado esta familia era un taxón cajón de sastre que contenía más
de 400 especies en 70 géneros, pero hoy en día gracias a estudios
genéticos se crearon por su escisión nuevas familias como
Acrocephalidae, Locustellidae, Cettiidae, Phylloscopidae y
Cisticolidae, quedando esta familia mucho mejor definida. Además se
han incorporado algunos géneros clasificados anteriormente en otras
familias tras demostrarse su proximidad genética con el grupo.
Actualmente la familia queda conformada con las currucas, género
Sylvia, los picoloros de Asia (anteriormente separados en la familia
Paradoxornithidae), varias especies de pájaros anteriormente
incluidas en Timaliidae, y el camea, un raro pájaro norteamericano
que durante mucho tiempo había sido un enigma taxonómico. Las
currucas de madera americanas (Parulidae), y las currucas
australianas no están cercanamente emparentadas con esta familia.
Los géneros que se incluyen dentro de la familia Sylviidae son:
-
Myzornis
-
Parophasma
-
Pseudoalcippe, anteriormente en
Illadopsis (Timaliidae)
-
Horizorhinus, anteriormente en
Timaliidae
-
Lioptilus, anteriormente en
Timaliidae
-
Sylvia - 28 especies de currucas
típicas
- Lioparus, anteriormente en
Alcippe (Timaliidae)
-
Moupinia
-
Fulvetta - fulvetas típicas (8
especies). Anteriormente en Alcippe (Timaliidae)
-
Chrysomma - 2 especies,
anteriormente en Timaliidae
-
Rhopophilus, anteriormente en
Cisticolidae
-
Chamaea
-
Conostoma, anteriormente en
Paradoxornithidae
-
Cholornis
-
Sinosuthora
-
Suthora
-
Neosuthora
-
Chleuasicus
-
Psittiparus
-
Paradoxornis
Sylvia es un género de aves
paseriformes de la familia Sylviidae, donde se clasifican 28 especies
de pájaros. Este grupo se extiende por Eurasia y África.
Son
aves de pequeño porte, plumaje discreto y poco vistoso, canto
melodioso y prolongado, muy activas e insectivoras. Habitan tanto
zonas de bosques frondosos y claros, como zonas de matorral
semidesértico, campos agrícolas y áreas urbanas. Las especies que
nidifican de climas templados son migratorias. La mayoría presentan
dimorfismo sexual, diferenciándose los machos por tener el píleo de
distinto color y otro tipo de manchas y listas diferentes de las de
las hembras.
Las currucas son un
grupo de aves que han vivido un proceso de especiación
principalmente alrededor del Mediterráneo. Fruto de ello, en la
actualidad pueden observarse de forma habitual en España nueve
especies, cifra que llega hasta las 21 sise tienen en cuenta todas
las regiones bañadas por el mar Mediterráneo.
La
palabra Sylvia deriva
del latín “silvia” que
significa selva y
undata de
“undatus, -a, -um” que
significa ondulado.
Su
distribución mundial se circunscribe al Paleártico occidental. Las
mayores poblaciones europeas de Sylvia undata se concentran en
España, pero también tienen presencia permanente en Portugal, en
gran parte de Francia, en Italia y en el sur de Inglaterra. En
España, la población se calcula entre 1,7 y 3 millones de parejas y
muestra una tendencia ligeramente negativa en la última década,
según reflejan los datos del programa SACRE para el periodo
1998-2005. Se encuentra ampliamente distribuida por toda la Península
y Baleares (norte de Mallorca, Formentera y Menorca), archipiélago
en el que se ha detectado su expansión en las últimas décadas.
Falta en Canarias y en extensas zonas del interior peninsular (áreas
más continentales de la Meseta norte, Extremadura y Andalucía). En
España aparecen tres subespecies: undata en el noreste y Baleares;
dartfordiensis en el noroeste; y toni en el centro y sur peninsular.
En África pueden encontrarse
únicamente en pequeñas zonas del norte, estando presentes como
invernantes en el norte de Marruecos y en el norte de Argelia. Se
distribuye desde el nivel del mar hasta los 2.000 metros de altitud.
Se trata de una especie sedentaria, aunque efectúa movimientos dispersivos tanto en altitud como en latitud.
Realiza desplazamientos invernales de cierta entidad hacia sectores más térmicos del centro y sur peninsular, Baleares y norte de África.
Algunas aves (especialmente los individuos juveniles y una parte de los adultos) tienden a abandonar las latitudes más norteñas para trasladarse a sectores de clima más atemperado. Estos movimientos se detectan en otoño (entre septiembre y noviembre) y en primavera (entre febrero y abril).
Tiene predilección por zonas de matorral y arbolado disperso, laderas con plantas de mediano porte como las jaras y brezos por los que siente predilección, aunque aulagas y arbustos espinosos también son de su agrado. En invierno pueden verse próximas a zonas urbanas.
Este
pequeño pájaro alcanza una longitud de unos 13-14
centímetros con una envergadura
alar de 20 cm.
Su pesdo aproximado es de 10
gramos. Tiene una larga cola
que mide unos 6 cm
y es negra con los bordes de las plumas grises y la pareja de
rectrices exteriores con un fino borde blanquecino. Llama
la atención sus ojos, observándose un anillo orbital de color rojo
alrededor del mismo y presentando el iris castaño rojizo con un Ø
de 3,5 mm. El pico es
negruzco y la base de la mandíbula inferior amarillo rosada. Las
patas son amarillentas.
Presentan
dimorfismo sexual. El macho
tiene el plumaje que cubre cabeza y dorso de un color gris azulado
oscuro, similar al de la pizarra o tal vez en tono más pardusco. Por
debajo se podría describir las partes inferiores de esta curruca de
color castaño rojizo o rosa pardo intenso asalmonado, donde la
garganta está moteada de puntos blancos y los flancos son de un tono
grisáceos, siendo claro el abdomen. La hembra es más parda por
encima y más clara por debajo, con la cabeza y el dorso en tono gris
pardo, y las partes inferiores rosadas o bien de un rojo pálido. La
hembra también presenta puntos blancos, aunque son más pequeños y
están menos marcados.
En
los inmaduros o juveniles no se puede identificar el sexo, y son
similares a las hembras careciendo
además del llamativo anillo
ocular rojizo y teniendo
el iris oscuro.
La
época de cría se extiende desde finales de abril hasta el mes de
julio. El nido es construido por ambos progenitores en la vegetación
densa, oculto entre el follaje. Consiste en un pequeño cuenco de
hierbas y finas ramas forrado de plumas. La puesta consta de tres a
seis huevos de color blanquecino, gris o verdoso, con moteado
variable, que incuban los dos adultos durante 12-14 días. Los
pollos, que son alimentados y atendidos asimismo por ambos padres,
inician sus primeros vuelos a los 12- 14 días y se independizan a
los 10-15 días tras abandonar el nido. La especie puede efectuar dos
puestas anuales y en algunas ocasiones incluso tres. La
longevidad de
la especie llega
hasta los 5 años.
Son
pájaros preferentemente
insectívoros,
alimentándose de orugas, mariposas, coleópteros, arañas y larvas
pero en
otoño e invierno de forma
ocasional también se alimenta
de semilas y frutos silvestres.
El
vuelo de la curruca rabilarga es ondulado y
de aleteo continúo debido
a sus cortas alas, lo
que produce un ruido perfectamente audible cuando estamos cerca del
pájaro. El vuelo es sin
embargo muy vistoso ya
que destaca la larga cola.
Su
canto se compone de un potente "creckcrek-crek" y
canta tanto posada como en
vuelo.