Indice de los casos médicos tratados en el Blog

Indice de los animales tratados en el Blog

martes, 2 de enero de 2018

Crotalus adamanteus

Dentro del Suborden Serpentes del que ya he hablado en unas cuantas ocasiones, tenemos la Familia Viperidae, constituida por especies venenosas alas que conocemos de forma global como vipéridos. Dentro de estos vipéridos englobamos a las víboras del Viejo Mundo y los crótalos, principalmente americanos. Las especies de esta familia no son especialmente largas aunque sí pueden ser muy corpulentas y la mayoría son ovovivíparas. Los colmillos con los que inoculan el veneno estas serpientes son de tipo solenoglifos, es decir, huecos y con un canal interior que se ha desarrollado a partir del ahondamiento progresivo del surco existente en otras familias hasta que se han fundido los márgenes de éste. Pueden erguirse cuando la serpiente abre la boca para atacar, y se pliegan de nuevo contra el techo bucal cuando cierra la boca; ello permite que sean muy largos y que la serpiente no necesite ni morder para inocular el veneno. Las 329 especies de la familia Viperidae se clasifican de la siguiente forma:
  • Subfamilia Azemiopinae Liem, Marx & Rabb, 1971
  • Subfamilia Viperinae Oppel, 1811 - víboras
  • Subfamilia Crotalinae Oppel, 1811 - crótalos
          
Los crotalinos o crótalos (Crotalinae)
son serpientes venenosas extendidas principalmente por América, con algunas especies en Asia. Su nombre común, víboras de foseta, hace referencia a que poseen una foseta loreal (un orificio a cada lado de la cabeza entre el ojo y el orificio nasal) un órgano termoreceptor muy sensible a las variaciones de temperatura que sirve para detectar las presas de sangre caliente y para localizar zonas más frescas en la que puedan descansar. En la actualidad, se reconoce 18 géneros y 151 especies: 7 géneros con 54 especies en el Viejo Mundo y 11 géneros con 97 especies en el Nuevo. El género tipo de esta subfamilia es Crotalus, cuyo especie tipo es la cascabel de madera, Crotlus horridus.

Los crótalos tienen un tamaño muy variable, desde 30-45cm hasta los 3,65 m y se distribuyen en el Viejo Mundo, desde el este de Europa hacia el este a través de Asia hasta Japón, Taiwán, Indonesia, India y Sri Lanka. En América desde el sur de Canadá hacia el sur, por América Central hasta el sur de Sudamérica.

Se encuentran en hábitats muy variados, que van desde desiertos a selvas. Pueden ser arbóreas o terrestres, existiendo también una especie semiacuática: el mocasín (Agkistrodon piscivorus ). La mayoría son nocturnas, prefiriendo evitar las temperaturas altas durante el día, y cazan por emboscada cuando sus presas favoritas también están activas. Al igual que la mayoría de las serpientes, los crotalinos prefieren evitar una confrontación con seres humanos, y sólo atacan cuando se sienten acorralados o amenazados.

En zonas templadas, muchas especies se congregan en un lugar protegido para pasar el hibernar en grupo, beneficiandose así de la producción combinada de calor.

Casi todos los crotalinos son ovovivíparos. Entre las excepciones ovíparas se encuentran géneros de víboras como Lachesis, Calloselasma, y algunos especies del género Trimeresurus. El tamaño de las camadas puede variar de dos para especies muy pequeñas, a 86, como las de Bothrops. Muchas crías de crotalinos tienen colas de colores brillantes que contrastan dramáticamente con el resto de su cuerpo. Estas colas se utilizan para un comportamiento conocido como atracción caudal, en que las crías atraen a sus presas con el movimiento ondulante de su cola.

Conocemos los siguientes géneros:
  • Género Agkistrodon     Palisot de Beauvois      (Cantiles)
  • Género Atropoides Werman, 1992 (Manos de piedra, Nauyacas saltadoras)
  • Género Bothriechis  Peters, 1859 (Víboras de pestañas)
  • Género Bothriopsis Peters, 1861
  • Género Bothrocophias Gutberlet & Campbell, 2001
  • Género Bothrops Wagler, 1824 (Punta de lanza)
  • Género Calloselasma     Cope, 1860
  • Género Cerrophidion     Campbell & Lamar, 1992
  • Género Crotalus  Linnaeus, 1758 (Serpientes de cascabel)
  • Género Deinagkistrodon Gloyd, 1979
  • Género Gloydius Hoge & Romano-Hoge, 1981
  • Género Hypnale Fitzinger, 1843
  • Género Lachesis Daudin, 1803 (Cascabel muda, shushupe)
  • Género Ophryacus Cope, 1887
  • Género Ovophis  Burger, 1981
  • Género Porthidium Cope, 1871 (Nauyaca-nariz de cerdo)
  • Género Sinovipera Guo & Wang, 2011
  • Género Sistrurus  Garman, 1883 (Cascabel pigmea)
  • Género Trimeresurus     Lacépède, 1804
  • Género Tropidolaemus  Wagler, 1830

Las serpientes de cascabel (Crotalus) son endémicas del continente americano, desde el sureste de Canadá al norte de Argentina. Todas las especies menos una, C. catalinensis, son fácilmente reconocibles por el característico cascabel en la punta de la cola. Normalmente viven en bosques arenosos y en zonas costeras. Son las más venenosas de Norteamerica. Respecto a su tamaño, algunas especies pueden alcanzar hasta 2,5 metros de largo y 4 kg de peso.Tienen un cuerpo delgado y compacto, su cabeza es más bien plana y triangulat y se distingue claramente del cuello. El centro del cuerpo está rodeado de escamas que están colocadas en 21 - 29 filas. El color de fondo de esta familia va de amarillento a verdoso, rojizo a pardo e incluso negro. Una fila de manchas oscuras de forma romboédrica pasa por la espalda y los laterales. La cola suele tener anillos alternantes más claros y más oscuros. El cascabel lo forman unos estuches córneos en el extremo de la cola. Por debajo, el color de la serpiente suele ser más claro y puede llevar manchitas. Personalmente creo que debe de haber muy pocas o ninguna persona de nuestra generación que no sepa distinguirlas rápidamente gracias a las películas que hemos visto de niños del FarWest. Se han reconocido 29 especies diferentes:
  • Crotalus adamanteus Palisot de Beauvois, 1799 (Cascabel diamante del este)
  • Crotalus aquilus Klauber, 1952 (Cascabel de Querétaro)
  • Crotalus atrox Baird & Girard, 1853 (Cascabel diamante del oeste)
  • Crotalus basiliscus Cope, 1864 (Cascabel basilisco)
  • Crotalus catalinensis Cliff, 1954 (Cascabel de la Isla Sª Catalina)
  • Crotalus cerastes Hallowell, 1854 Sidewinder
  • Crotalus durissus Linnaeus, 1758 (Cascabel tropical)
  • Crotalus enyo Cope, 1861  (Cascabel Baja)
  • Crotalus horridus Linnaeus, 1758 (Cascabel de los bosques)
  • Crotalus intermedius Troschel, 1865 (Cascabel de cabeza pequeña)
  • Crotalus lannomi Tanner, 1966 (Cascabel Autlan)
  • Crotalus lepidus Kennicott, 1861 (Cascabel de las rocas)
  • Crotalus mitchellii Cope, 1861 (Cascabel de lentes)
  • Crotalus molossus Baird & Girard, 1853 (Cascabel de cola negra)
  • Crotalus morulus Klauber, 1952
  • Crotalus oreganus Holbrook, 1840 (Cascabel del oeste)
  • Crotalus polystictus Cope, 1865 (Cascabel mexicana cabeza de lanza)
  • Crotalus pricei Van Denburgh, 1895 (Cascabel de dos manchas)
  • Crotalus pusillus Klauber, 1952 (Cascabel de Tancitaro)
  • Crotalus ruber Coper, 1892 (Cascabel diamante rojo)
  • Crotalus scutulatus Kennicott, 186 (Cascabel de Chihuahua)
  • Crotalus simus Latreille, 1801 (Cascabel centroamericana)
  • Crotalus stejnegeri Dunn, 1919 (Cascabel de cola larga)
  • Crotalus tigris Kennicott in Baird, 1859 (Cascabel tigre)
  • Crotalus tortugensis Van Denburgh and Slevin, 1921 (Cascabel diamante de la Isla Tortuga)
  • Crotalus totonacus Gloyd & Kauffeld, 1940 (Cascabel Totonaca)
  • Crotalus transversus Taylor, 1944 (Cascabel rayada de la Sierra)
  • Crotalus triseriatus Wagler, 1830 (Cascabel Parda)
  • Crotalus viridis Rafinesque, 1818 (Cascabel de la pradera)
  • Crotalus willardi Meek, 1905 (Cascabel de Nariz Puntiaguda)

Crotalus adamanteus Palisot de Beauvois, 1799

La palabra Crotalus deriva del griego "krotalon" que significa golpeteo o traqueteo. Adamanteus deriva del latín y significa como el diamante.

A esta serpiente se la conoce vulgarmente como Cascabel diamantino del este.

Su área de distribución se extiende desde el sureste de Carolina del Norte, hacia el sur a lo largo de la llanura costera, a través de la península de Florida incluyendo los Cayos de la Florida, y al oeste a lo largo de la costa del Golfo de México por el sur de Mississippi y sureste de Luisiana.

Esta especie habita los bosques secos de pino, flatwoods de pino y palmito salvaje, dunas, "hamacas" costeras marítimas, bosques de pino de hoja larga/roble de Turquía, juncia de hierba pantanos y bosques pantanosos, pantanos de cipreses, hamacas Mesicas, bosques mixtos de arena, hamacas xéricos, y marismas, así como praderas húmedas durante los períodos secos. En muchas áreas, parece utilizar madrigueras de roedores grandes durante el verano y el invierno.

Con una longitud máxima de 240 cm, es una de las serpientes venenosas más largas del continente americano y la especie más larga de las serpientes de cascabel. El patrón de escamas incluye 25-31 (generalmente 29) filas de escamas dorsales en el cuerpo medio, 165-176/170-187 escamas ventrales en los machos/hembras y 27-33/20-26 escamas subcaudales en los machos/hembras. En la cabeza, la escama rostral es más alta que es ancha y se conecta con dos escamas internasales. Hay 10-21 escamas en la región prefrontal-internasal y 05-11 (generalmente 7-8) escamas intersupraocular. Por lo general, hay dos escamas loreales entre los preoculares y el postnasal. Hay 12-17 (usualmente 14-15) escamas supralabiales, el primero de las cuales está en contacto amplio con la prenasal, y 15-21 (usualmente 17-18) escamas sublabiales. 


El patrón de color consiste de un color de fondo marrón, pardo-amarillento, gris o verde oliva, cubierta con una serie de 24-35 manchas dorsales en forma de diamante, de color marrón oscuro a negro con centros ligeramente más claros. Cada una de estas manchas se detalla con un perímetro formado por una hilera de escamas de color crema o amarillento. En la parte trasera, las formas de los diamantes son más parecidas a bandas cruzadas y son seguidas de 5-10 bandas alrededor de la cola. El vientre es de color amarillento o crema, con manchas oscuras a lo largo de los lados. La cabeza tiene una raya postocular oscura que se extiende desde detrás del ojo hacia atrás y abajo hacia el labio. La parte trasera de la raya llega hasta el ángulo de la boca.

A esta serpiente casacabel, el ser sumamente venenosa y una de las de mayor tamaño de America, le ha traído, sin embargo, más perjuicios que beneficios. La causa el ser humano y su estúpido espiritu de competición. Varias excusas como el controlar una población de masiado grande de serpientes de esta especie, protejer al ganado de sus picaduras o al mismo ser humano, esgrimiendo el numero de personas afectadas por la picadura de esta especie de serpiente al año fueron el detonante para crear un concurso o rodeo en el que durante determinado número de dias al año se cazan sin tino ni control todos los especimenes posible de Crotalus adamanteus para matarlas, depellejarlas, vender su piel y comer su carne.


Fotógrafo: Jo-Anne McArthur

En un pueblo llamado Sweetwater en Texas todos los años se hace el rodeo de serpientes de cascabel mas grande de América en el que participan entre 11.000  y 25.000 personas y se cazan incontables serpientes cascabel que luego son decapitadas y desolladas frente a la multitud, después de haberles extraído el veneno. Finalmente se dan un festín con su carne. El pasado 2015 se consumieron en el evento, 1714 kilogramos de serpientes.


Fotógrafo: Courtney Sacco


Bruce Means Presidente y Director Ejecutivo del Coastal Plains Institute and Land Conservancy (CPI) y profesor del Departamento de Ciencias Biológicas de la Universidad del Estado de Florida en Tallahassee, ecologista con mas de 45 años de experiencia, con uno de sus mayores intereses centrado en la herpetologíay mas de 260 investigaciones científicas, documentos, informes y artículos populares, escribió en el 2008 un interesante artículo sobre el tema en Herpetological Conservation and Biology en el que demuestra y explica como esta burrada esta haciendo que disminuya de forma preocupante la población de la especie.


EFFECTS OF RATTLESNAKE ROUNDUPSON THE EASTERN DIAMONDBACK RATTLESNAKE (CROTALUS ADAMANTEUS). Herpetological Conservation and Biology 4(2):132-141.